Te Quiero, Pero No Me Cambies...

    Lo siento, pero yo soy así; soy rastas, orejas agujereadas, gorros de lana... Soy de pelo largo a más no poder, soy de sol, pero también de lluvia, de estar en las nubes pero disfrutar de la tierra, soy del sol y amante de la luna llena que se pasa noches admirándola, soy tanto de playa como de campo, pero no muy de ciudad...

    No soy de polito Ralph Lauren, ni gafas Ray-Ban, ni siquiera soy de tacones altos.

    Soy de vestidos de flores, pantalones cortos o caídos, camisetas holgadas con símbolos de la paz y dibujos inexplicables; no soy de negro, ni siquiera soy monocolor.

    Soy cantoautora de vida loca con guitarra en mano y música en boca, que vive y desvive por su sueño. Pero no soy de música inaccesible y menos aún soy abogada o arquitecta.

    No soy médico con consulta privada; soy una sin fronteras, que ayuda a unos niños distintos que quiere como hijos.

    Y es que no soy de hacerle caso a los demás, y menos aún si es por algo que quiero.

    Soy de diseñar mi ropa, de crear mi mundo, imaginarlo, formarlo e intentar recrearlo en la vida real. Porque yo soy creación. Soy de escribir lo que siento porque cuando hablo no me salen las palabras.

    No entiendes que soy del mundo y no de unas cuantas personas, que si me repito en algo, es porque es en lo que creo, en lo que sueño...

    Por favor, no quiero cambiar; no me lo pidas, porque aunque te quiera con toda mi alma... no podré.